Lo más valioso que tiene un anciano es SU PROPIA HISTORIA, sus logros, sus aprendizajes, sus tragedias, su pasado…eso es lo más valioso que tienen para dar.

Crecer junto al cariño de sus abuelos hace a los niños más felices, más sensibles, y para ellos es normal convivir y acompañar a sus abuelos, los sensibiliza ante la vejez y los cuidados hacia ellos.

El envejecimiento activo mejora la calidad de vida de los adultos mayores y ayuda a crear una base sólida para mantener la independencia y vivir una vida plena en cada etapa de la vida. Es importante reconocer la importancia de las personas de la tercera edad en nuestras vidas, en el entorno familiar y en la sociedad como agentes de cambio, productivos e independientes.

RECOMENDACIONES PARA UNA MEJOR CALIDAD DE VIDA EN LOS ADULTOS MAYORES

Si en tu familia aún tienes la fortuna de contar con tus mayores, os damos algunas sugerencias para promover su salud física y mental:

  • Promover su actividad física, moderada y permanente.
  • Acordar actividades con responsabilidades.
  • Reconocer sus logros y atender su autoestima.
  • Escuchar y respetar sus decisiones.
  • Permitir que en lo posible interactúe con la familia.
  • Conceder valor a su experiencia.
  • Ejercitar la memoria con juegos de mesa o conversación.
  • Visualizar el álbum fotográfico. Que surjan las historias…
  • Escuchar su música y hablar de los personajes de su tiempo.
  • Reconocer su capacidad de amar.
  • Permitir que cumpla con su propósito de vida.

“SI NECESITAS PEDIR AYUDA LLÁMANOS, ES NORMAL QUE NO PUEDAS CON TODO”

La vida de las personas que atienden a una persona mayor dependiente puede verse afectada de muchas maneras. Es frecuente que experimenten cambios en las relaciones familiares, el trabajo y su situación económica, su tiempo libre, su salud o su estado de ánimo. Cuando se cuenta con el apoyo de un cuidador o acompañante, ya sea familiar o profesional, este ofrecerá tranquilidad y seguridad tanto para el ser querido como para la familia misma.

Para EMPATÍA “DÉJAME CUIDARTE”, las funciones más destacadas que envuelven el trabajo de una cuidadora es pensar en todas aquellas actividades que giran en beneficio de la salud y el bienestar de las personas mayores. Sobre todo, a aquellas que están cómodas en su casa y quieren mantener esa tranquilidad dentro de su propio hogar.

Estas funciones vitales se resumen en estas áreas de trabajo diario:

  • Atender las necesidades de la persona mayor.
  • Garantizar la higiene y el aseo en todo momento.
  • Controlar y organizar la medicación recetada.
  • Realizar tareas de rehabilitación y ejercicio, siempre y cuando sea necesario y se pueda.
  • Acompañamiento durante traslados y paseos.
  • Fomentar las relaciones sociales y la cercanía para mantener activa la salud mental.
  • Encargarse de las comidas y la casa.
  • Fomentar la autonomía para mantener sus capacidades preservadas el mayor tiempo posible.

La vejez, es desde el punto de vista psicológico, la etapa donde la persona está en su máximo sentido de auto trascendencia y de reflexión. Debería ser la etapa más plena y más feliz del ser humano”.

Heidi Spitzer, Gerontóloga

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